El RCD Mallorca enterró un poco más sus esperanzas de permanencia después de caer 3-1 ante el Athletic Club en la jornada 32 de LaLiga, donde el mexicano de 15 años, Luka Romero, no vio acción. Por su parte, el cuadro local todavía puede soñar con Europa.
Con este resultado, la tercera derrota en los cuatro encuentros jugados desde la reanudación del campeonato, el conjunto bermellón (26) continuará una semana en descenso, a seis puntos de unos puestos de permanencia que se pueden alejar si el Eibar puntúa este domingo en el Nuevo Los Cármenes.
Mientras, los de Gaizka Garitano, con 45 puntos, pueden seguir aspirando a alcanzar las posiciones continentales, que marca la Real Sociedad con 47 unidades y un partido menos. Sus próximos exámenes, sin embargo, serán de altura: Valencia, Real Madrid y Sevilla.
Con solo cinco minutos disputados en San Mamés, Unai López probó los reflejos de Manolo Reina, que no pudo hacer nada al cuarto de hora cuando el colegiado decretó penalti después de que Lago Junior derribase a Raúl García; el propio jugador navarro se encargó de sorprender al guardameta bermellón con un disparo raso y centrado. Solo ocho minutos más tarde, Sancet aprovechó un balón de saque de esquina para engancharlo y hacer el segundo (min.24).
Budimir, ya en el minuto 70, recortó distancias para los mallorquinistas al materializar con éxito una pena máxima tras una falta de Yuri sobre Trajkovski, pero Villalibre despejó cualquier atisbo de duda; en el 89, el delantero de Gernika sentenció al finalizar una gran jugada colectiva del equipo.