Desde hace varios años Manuel “El Loco” Valdés y Sergio Corona, comediantes mexicanos, hicieron tradición el apostar cada vez que el Clásico Nacional se acercaba.
El “Loco”, fiel aficionado a las Águilas del América, siempre trataba de imponerse sobre Corona, fanático de las Chivas desde hace ya muchos ayeres.
Las apuestas eran para hacer el ridículo en las calles, éstas iban desde dejarse mojar por el otro, salir a gritar que el rival era el mejor, pasear con la camiseta contraria, ir a comprar al mercado con pelucas, tubos y vestidos de mujer, lavar el coche del que ganó, bailar vestidos de hawaiana en la Alameda Central, entre muchas otras.
En los últimos años, debido al mal estado de salud de Manuel Valdés, las apuestas se cancelaron, pero sin lugar a dudas eran más que legendarias y se volvieron parte del folclore futbolístico mexicano.
“Quiero que mi compadre se recupere para que lo vuelva a humillar con mi Guadalajara, ahora no puede, pero cuando esté listo, volveremos a hacerlo”, dijo Corona en una entrevista.